¡Pan! ¡Bang! ¡Crack! / Jorge Espinosa Maldonado (Ecuador)

¡Pan! ¡Bang! ¡Crack!

Cuando me mudé a Estados Unidos me impresionó la presencia extrema de la policía y de cómo la sensación de seguridad de la población depende principalmente de su identidad y de la manera en la que los demás nos perciben. Las minorías étnicas navegan ciudades como Los Ángeles con esta preocupación en mente. La relación de este país con las armas es históricamente intensa y en estos momentos, de fuerte polarización política, es un elemento simbólico que representa, principalmente para el nacionalismo cristiano blanco -aunque no sea el único-, las libertades ganadas a lo largo de la historia estadounidense.

En el Ecuador nuestra relación con las armas de fuego es diferente. Aunque no somos ajenos a la violencia armada -nuestra historia cercana está marcada por episodios violentos, a veces a manos de nuestros propios Ejército y Policía-, en nuestra vida diaria no solíamos pensar que solo “los hombres de bien”, desconfiados del gobierno y de las fuerzas del orden, son los destinados a defendernos de un sinnúmero de posibles amenazas.  No hemos tenido, como país, una fijación por las armas como en otros lugares, pero algunos oportunistas están presionando para que eso cambie. 

Después de los últimos episodios de violencia brutal en las cárceles del Ecuador y la incapacidad estatal para frenar al crimen organizado y los asesinatos dentro y fuera de reclusorios, la sensación de inseguridad se ha amplificado y la frágil paz pública desaparece rápidamente. ¿Es posible que nos acostumbremos a este estado de violencia? ¿Podrá el ruido de los disparos convertirse en un elemento más del paisaje?

Usando estas condiciones como telón de fondo desarrollé las obras que comprenden ¡Pan! ¡Bang! ¡Crack! El proyecto se desarrolla alrededor de piezas sonoras y audiovisuales que utilizan sonidos onomatopéyicos de disparos como elemento principal. Los sonidos fueron obtenidos a finales de 2020 a través de una convocatoria pública en redes sociales con las preguntas: ¿Has oído alguna vez el sonido de un disparo real? Si es así, ¿puedes grabar el sonido de tu voz haciendo ese sonido?  Las respuestas grabadas enviadas por gente de diferentes partes del mundo fueron clasificadas por sus características tímbricas y después limpiadas en estudio.

Un disparo de arma de fuego, aunque éste no sea en el contexto de un acto criminal, es un episodio violento. No es necesario estar cerca del arma para estremecerse por su fuerte sonido y por lo que ese disparo podría significar. 

Sin embargo, nuestra memoria de un disparo varía dependiendo de las circunstancias que rodearon al episodio; a veces, la detonación puede confundirse con otros sonidos ambientales; en otras ocasiones las condiciones del lugar pueden acortar la reverberación del tiro y, por el contrario, en determinados entornos puede sonar largamente y retumbar antes de desaparecer.  Pero ¿es el sonido que recordamos real o está modelado por los cientos o miles de disparos creados en estudio que hemos escuchado desde chicos en la radio, la televisión o el cine? Nuestra memoria, sin duda, está definida por los ruidos artificiales y modelados de la industria del entretenimiento, donde normalmente son más espectaculares, profundos y cercanos.

Lo interesante para mí es que cuando tratamos de reproducir esa detonación con nuestra voz, la mayor parte de las veces no se parece en nada al sonido real. A la gran mayoría de nosotros, con nuestras enormes limitaciones técnicas vocales, apenas nos es posible producir un ruido que es lejanamente parecido al original y que casi siempre resulta hasta cómico y caricaturesco. Para este proyecto exploré, precisamente, esas limitaciones y las diferentes ideas que podrían evocar los nuevos sonidos que son una reproducción borrosa del original. Con este ejercicio, que despoja de toda su violencia al acto de disparar, me interesa señalar y explorar esa indiferencia actual ante la situación real de violencia armada que estamos viviendo, como si todo siguiera pasando dentro de una pantalla y no a la vuelta de la esquina.

SOBRE EL ARTISTA:

Jorge Espinosa Maldonado es un artista, músico, educador y diseñador gráfico radicado en Los Ángeles, California. Ha realizado exhibiciones en Ecuador, Estados Unidos, Argentina, Colombia, Paraguay y Perú. Paralelamente a su trabajo audiovisual compone bandas sonoras para obras de danza contemporánea y participa frecuentemente en proyectos de rock y música experimental.

www.jorgeespinosam.com

AGENDA DE LA QUINTA TRIPLETA DE EXPOSICIONES:

Jueves 8 de diciembre 2022 
19h00 – Inauguración
Sábado 10 de diciembre 2022
10h30 – Recorrido mediado con los artistas Adrián Preciado y Lisbeth Carvajal 
Miércoles 18 de enero 2023
18h00 a 19h00 – Conversatorio ¡Pan! ¡Bang! ¡Crack! violencia connatural a las armas, un recorrido a través de la obra e investigación de Jorge Espinosa (Actividad virtual)
Miércoles 1 y jueves 2 de febrero 2023
09h00 a 18h00 – Taller “Nosotros” con motivo de la exposición individual del artista Adrián Preciado
Sábado 4 de febrero 2023
10h00 a 13h00 – Taller de dibujo para niñas y niños con motivo de la exposición individual de la artista Lisbeth Carvajal

Horarios de atención al público:
De miércoles a sábado de 10h00 a 17h00
En exposición hasta el 4 de febrero de 2023
Acceso Gratuito

*La exposición permanecerá cerrada del 17 de diciembre 2022 al 10 de enero 2023

REGISTRO FOTOGRÁFICO

Montaje de la exposición.

Inauguración – 8 de diciembre 2022

Inauguración – 8 de diciembre 2022